Un vistazo detrás de cámaras al diseño del nuevo Hotmail: Primera parte
Publicado originalmente en The Windows Blog por Michael Kopcsak – Director Ejecutivo de Experiencia de Usuario, Windows Live
Qué queremos lograr
Hablar con los clientes nos da increíbles ideas sobre cómo mejorar Hotmail.
Una de las cosas que más preocupa a los usuarios es la sobrecarga en el buzón de entrada: las personas quieren encontrar correos electrónicos importantes rápidamente. Ya sea una conversación importante con amigos o un video de YouTube que mejoró tu día, puede ser difícil encontrar los mensajes que más importan. Cuando nos decidimos diseñar el nuevo Hotmail, nuestro principal objetivo fue resolver el problema del desorden.
Además de limpiar el buzón de entrada, los clientes también nos dijeron que querían ahorrar tiempo escribiendo correos electrónicos. En respuesta a esta necesidad, diseñamos la interfaz de correo electrónico para hacer que el contenido del mensaje cobre vida y que puedan disfrutarlo justo desde dentro del correo electrónico mismo. Por ejemplo, cuando tu hermana te envía un vínculo a fotos en Flickr, no tendrás que preocuparte por visitar Flickr. Cuando compras un paquete en línea, puedes ver dónde está desde dentro del comprobante de envío. Cuando colaboras en un documento de Office, lo puedes hacer en línea sin tener que instalar Office. Nuestro objetivo fue que estas funciones fueran tan fáciles y naturales de usar al poner sumo cuidado en un diseño limpio y ordenado que ahorrara clics y trabajo.
Los principios de diseño que usamos a lo largo del proceso
Nuestro equipo de diseño e investigación está conformado por personas que durante años han aprendido sobre lo que le importa a los clientes y cómo esperan interactuar con servicios en la web. A lo largo del tiempo, hemos desarrollado principios de diseño para asegurarnos que hacemos lo correcto. Estos principios, conocidos como Windows User Experience Principles, buscan hacer cambios que sean transparentes y no un repentino “big bang”.
EL CAMBIO ES MALO, A MENOS QUE SEA GENIAL
Sabemos que el cambio es difícil para nuestros clientes, por lo que no queremos tomarlo a la ligera. Cualquier cambio que hiciéramos debía tener un objetivo claro y una consecuencia que valiera la pena.
Las preguntas que nos hicimos fueron:
- ¿Entendemos por completo las fuerzas y debilidades de la versión anterior?
- ¿Hemos considerado todos los inconvenientes del cambio?
- ¿Los usuarios nos agradecerán por este cambio?
RESOLVER DISTRACCIONES, NO LA CAPACIDAD DE DESCUBRIMIENTO
Debemos tomar difíciles decisiones en cuanto a diseño para que nuestra experiencia sea natural e intuitiva en los momentos correctos y confiar en que la gente explorará el resto.
Las preguntas que nos hicimos fueron:
- ¿En qué aspectos será increíble la experiencia?
- ¿Estamos presentando elementos de interfaz cuando son relevantes?
AUMENTAR LA CONFIANZA CON LA REDUCCIÓN DE CONCEPTOS
Es fácil emocionarse al querer hacer que todo sea nuevo y dejarse llevar al renovar o repensar todos los detalles, pero esto no siempre resulta en un buen diseño.
Las preguntas que nos hicimos fueron:
- ¿Estamos eliminando lo que es innecesario en nuestro diseño?
- ¿Estamos manteniendo lo que funciona y reinventando sólo cuando es necesario?
- ¿Cómo se justifica cualquier concepto nuevo de lo ya existente?
Un vistazo cercano a algunos de los grandes cambios
En mis próximas dos publicaciones les daré un vistazo detrás de cámaras sobre cómo logramos algunos diseños particulares de algunos de nuestros principales cambios en el nuevo Hotmail. Les mostraré las ideas y conceptos que se sometieron a debate y discusión con los clientes Hotmail a lo largo del camino para que puedan ver la variedad de opciones que consideramos y evaluamos con clientes de la vida real.